¡El chile bajo el aceite es un must have para todos los amantes del picante!
Y por esa sencilla razón queremos explicarles cómo se hace para conseguirlos.
Como sabemos podemos conservar muchos alimentos en el aceite, que toma el sabor de lo que se sumerge en él. En nuestro caso, no sólo vamos a guardar los chiles, sino que también tendremos un muy buen aceite picante para utilizar para condimentar cada plato.
Recuerden que hay que quitar el agua del chile y deshidratarla con sal para prevenir el moho.
Como se decía, hay que eliminar cualquier rastro de agua del chile con sal. De esta manera se previenen los mohos. El procedimiento es el siguiente: se cortan los pimientos a gusto y se colocan sobre papel que absorbe el agua como el scottex y luego se rocían con sal.
Después de un día interno hay que girar y dejar así por otro día. En resumen, esta operación tiene lugar durante tres días. La sal debe distribuirse generosamente en los chiles por todo el espacio para que puedan contribuir a la deshidratación normal.
Las semillas se pueden dejar en la fruta, si nos gusta. En cualquier caso, les recordamos que las semillas están unidas a la placenta del chile, que es la parte más picante porque es más rica que Capsaicina.
El frasco debe llenarse con aceite, que debe cubrir completamente los pimientos.
No los dejes sobre el aceite, de lo contrario podrían contraer moho.
Se recomienda dejar reposar todo durante dos semanas. A continuación, puede retirar el aceite y ponerlo en otro recipiente, o mantenerlo con los pimientos. La elección es siempre suya.
Puedes probarlo en muchos platos. de la pasta a la carne, a la pizza y el pan...
Buen apetito!